jueves, 14 de marzo de 2013

LXX 1990´s Ethiopia / Yabelo-Konso 7.9 - Viajes





Un año más tarde en 1998, el sur estaba en mi mente, mi querido amigo canario, Pablo, decidió embarcarse también en el viaje, esta vez accederíamos al sur de Ethiopia desde Kenia, Nairobi, un viaje diferente de carreteras y no tiempo, o sin prisas ya que disponíamos de un par de meses, para tomárnoslo con calma. Nuestra primera escala fue Paris, siempre querida, por los amigos que siempre nos dieron cuartelillo y mucho cariño, primero Marisol y Valentín, años mas tarde Dominique, Jean Baptiste y Coralie, siempre os llevo en el corazón, Paris puerto de partida y llegada siempre que podía, ya que revelar todo el material fotográfico resultado del viaje, fue  siempre mas barato que en la península ibérica, tras una escala de una par de días, volamos a Nairobi, una nueva ciudad, nueva incertidumbre, reconocer el terreno, compilar la información necesaria, finalmente, acabamos durmiendo en las habitaciones de una agencia de viajes que disponía para sus viajeros en transito, intentaron vendernos un Safari por el Massai Mara y Nakuru, pero terminaríamos realizandolo a nuestro regreso de Ethiopia, lo primero que queríamos era partir de la gran ciudad y adentrarnos en el transito de la carretera y los caminos hacía el norte de Kenia-Sur de Etiopía.

El viaje se podría realizar en tres etapas desde Nairobi, la primera en autobús hasta Isiolo en 15 horas aprox, en Isiolo el asfalto desaparecía para adentrarse en la sabana mas pura, pistas interminables a lomos de la carga de un trailer, con el que previamente había que negociar con su conductor, antes que despuntaran los primeros gallos de la mañana empezó nuestra gran aventura, Isiolo-Marsabit, segunda etapa alucinante del trayecto, como un elefante con ruedas el hábil conductor iba sorteando todos accidentes de la pista, el sol a medio día a lomos de un iveco, al atardecer se divisaban las lucecitas de Marsabit, una larga y dura jornada, prologo de los que nos tenia deparado el viaje a lo desconocido. 
En nuestra tercera etapa Marsabit-Moyale (frontera con sur Ethiopia), nuestra curiosidad iba en aumento, navegando por los caminos insólitos del norte de Kenia, atravesando la sabana nos cruzamos con los guerreros Turkana a la altura del Mar de Jade o Lago Turkana, a tan solo 250 km de Ethiopia, cada vez estábamos mas cerca de la frontera, 15 h. mas tarde nuestro querido conductor nos aparco en la ciudad fronteriza de Moyale.
Al pasar la frontera nos encontramos en un cruce de caminos, Yabelo, puerta de entrada a las salvajes tierras del sur de Ethiopia, donde desaparece el transporte regular y el tiempo, nos perdidos durante 30 días en el valle Omo-Mago; Konso, Turmi, Omorate, Arba Minch, tierra de los Mursi, los Omo y Mago, gentes de madera y piedra. Nuestra alucinante incursión en el sur termino en Shashemene, arteria principal para dirigirse al norte Addis Abeba, o al sur Moyale (frontera con Kenia), nuestro camino era el sur, de vuelta a Nairobi, en busca esta vez de la fauna mítica africana, pero con la mente llena de increíbles sensaciones.




                                                                          7.9 Ethiopia (south)

                                                           j - “Peoples of the wilderness”  part I



Huele a brasa, se respira libre y los gallos despuntan con sus primeros cantos en el fondo del chamizo, la vida empieza temprano.

Después de lluvias pasadas y tras largos días de carreteras inhóspitas con un amigo canario, Pablo, que se ha sumado al devenir de la carretera,  Por fin Yabelo, la puerta de las tierras de las gentes del amanecer, en las tierras lejanas del sudoeste de Etiopía.


Cruce de caminos, suena el ajetreo de los bultos y fardos a la espera de cualquier medio de transporte en dirección a......., después de tantos días uno pierde la dirección el sentido de a donde nos dirigimos, en medio de este espacio sin rumbo, y sin medios de transporte mas allá de las rutas principales, las tierras de lo desconocido donde no existen realmente las vías sino que se adivinan algunas sendas trazadas por el trasiego de unos pies endurecidos.


















































































 








 
En esta ciudad fronteriza, después de varios días aparece un camión que se dirige hasta Konso, y continua el viaje, el viaje a lo desconocido, embutidos a lomos nos dirigimos renqueantes atravesando el paisaje, se respira la inmensidad del continente, el contacto físico es convivencia, de nuevo se estrechan lazos y se abren puertas, consigo capturar muchas imágenes pero otras las retengo en mi memoria.
  








 




















Tras largas horas de traqueteo llegamos a Konso donde habitan las gentes de Madera y Piedra, agricultores y sedentarios, habitantes del bajo valle OMO, artesanos del barro y los tejidos, comercializan sus productos los días de mercado con las diferentes etnias con las que consiguen convivir en paz.


































































                                         http://www.globeholidays.net/Africa/Ethiopia/Maps3.htm




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